Domingo XI del Tiempo Ordinario. Ciclo C.
Remitte, Domine, culpam peccati mei.
Sal 31, 1b-2. 5. 7. 11 (R.: cf. 5d)
Respuestas al Salmo Responsorial:
Perdona, Señor, mi culpa y mi pecado.
Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor
no le apunta el delito
y en cuyo espíritu no hay engaño.
Había pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: "Confesaré al Señor mi culpa",
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado.
Tú eres mi refugio,
me libras del peligro,
me rodeas de cantos de liberación.
Alegraos, justos, y gozad con el Señor;
aclamadlo los de corazón sincero.
ALELUYA
1 Jn 4, 10b
Dios nos amó y nos envió a su Hijo
como víctima de propiciación por nuestros pecados.