Cancionero Litúrgico

Presentamos un Aleluya concebido para ser utilizado durante la primera parte del llamado Tiempo Ordinario (o Domingos durante el año). Se trata del tiempo comprendido entre "el lunes que sigue al domingo que cae después del día 6 de enero y dura hasta el martes antes de Cuaresma" (víspera del Miércoles de Ceniza). Es decir, del tiempo ordinario comprendido entre el fin del Tiempo de Navidad y el comienzo del Tiempo de Cuaresma.

Dependiendo del año (del día en que se celebra la Pascua, que, como es bien sabido, es una fiesta movible), este período comprende desde el Domingo II hasta el Domingo V ó IX del Tiempo Ordinario. La Pascua (domingo siguiente a la primera luna llena de primavera) puede celebrarse, según el año, entre el 22 de marzo y el 25 de abril, por lo que el Miércoles de Ceniza varía su celebración entre el 4 de febrero y el 10 de marzo anteriores. Por eso, el número de semanas de este tramo del Ordinario varía entre cinco y nueve, como se dijo. (Recuérdese que no existe Domingo I del Tiempo Ordinario, ya que ese domingo se celebra el Bautismo del Señor, aún perteneciente al Tiempo de Navidad.)

Aleluya de Candelas

Se presentan dos Aleluyas alternativos, para que cada Asamblea elija uno. Ambos comparten idéntico arreglo musical para el Versículo antes del Evangelio. Ambas alternativas están escritas en tonalidad de Do mayor, y en compás de compasillo. Llamaremos al primero de estos Aleluyas, Aleluya de Candelas por celebrarse esta fiesta (Presentación del Señor) justamente en este tramo del Tiempo Ordinario. Llamaremos al segundo Aleluya de la Candelaria, por idéntico motivo, pero para distinguirlos. El Aleluya segundo comienza con un intervalo de sexta, poco intuitivo, a pesar del preludio instrumental; puede ser difícil para la Asamblea, por lo que está más pensado para celebraciones más solemnes, en las que la responsabilidad musical recae más sobre el coro que sobre el Pueblo.

Como siempre, la melodía de su estrofa puede ser modificada ligeramente para dar cabida al versículo antes del Evangelio de cada domingo y solemnidad dentro de esta parte del tiempo durante el año.

• Aleluya de Candelas
  
• Aleluya de la Candelaria
  

A continuación se presenta la partitura de la melodía correspondiente al versículo cantado (las voces de acompañamiento se recogen en la partitura del propio Aleluya, para la estrofa tipo). Y se presentan para los domingos del Ordinario que pueden eventualmente celebrarse antes de Cuaresma, y para los tres ciclos litúrgicos, así como para las fiestas y solemnidades que podrían, según el año, celebrarse durante este período de tiempo.

Presentamos en adelante varios Aleluyas para Tiempo Ordinario (o Domingos durante el año), pensados para ser utilizados en la parte del año litúrgico después de la Pascua, y hasta su finalización.

Dependiendo del año, la fecha en que se celebra Pentecostés, que cierra el Tiempo Pascual, varía entre el 11 de mayo y el 14 de junio. Al día siguiente se retoma el Tiempo Ordinario, comenzando el lunes de la semana VII a XI (según el año). Sin embargo, los dos primeros domingos se celebran las Solemnidades de la Santísima Trinidad y del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo (salvo que esta solemnidad siga celebrándose en jueves). Por ello, tras reanudarse el Tiempo Ordinario, y tras estas dos solemnidades, el primer domingo de Tiempo Ordinario cuya liturgia se celebra puede variar entre el Domingo IX y el Domingo XIII.

Por otro lado, en nuestro país hay un evidente parón debido a las vacaciones de verano (que se celebran en julio-agosto), tras las cuales, en septiembre, comienza un nuevo "curso pastoral" (y escolar). Parece por ello sensato elegir esos domingos de vacaciones veraniegas como fechas propicias para cambiar entre un Aleluya y el siguiente. Por tanto, propondremos un Aleluya para el período entre Pentecostés hasta vacaciones, y otros dos para el período posterior, hasta el final del año litúrgico, con la festividad de Cristo Rey, y antes del período de Adviento del año litúrgico siguiente.

Finalmente. En apartados anteriores, un único Aleluya se repetía durante varias semanas consecutivas, para facilitar el aprendizaje por parte de la Asamblea, y, por tanto, su participación. Sin embargo, en este caso nos hemos visto obligados a cambiar de estrategia en unos pocos domingos, ya que nos hemos enfrentado con versículos aleluyáticos cuya longitud puede llegar a ser de hasta cincuenta sílabas. Muy difícil acomodar con la misma melodía versículos con longitudes tan diferentes. Hemos optado en estos casos difíciles por utilizar un Aleluya diferente pensado para estos versículos especialmente largos. Cuando sea posible la utilización de los dos Aleluyas, se dará la musicalización de ambos. Los domingos cuyos versículos son especialmente largos y han sido musicalizados con este Aleluya específico se encuentran al final.

Aleluya de San Juan

Proponemos por tanto un Aleluya para los domingos del Tiempo Ordinario que se celebran después de Pentecostés, y hasta la llegada de la ruptura vacacional, incluyendo las solemnidades y fiestas de este período del año. Lo llamaremos Aleluya de San Juan, por celebrarse la solemnidad de San Juan Bautista dentro de este tramo del Tiempo Ordinario. De forma excepcional (por tratarse de un Aleluya), lo hemos escrito en modo menor, aunque sugerimos terminar en modo mayor tras la repetición del Aleluya. Subráyese, en su interpretación, la hemiolia en compases alternativos en el versículo.

• Aleluya de San Juan (para la parte de Tiempo Ordinario después de la Cuaresma, y para estrofa corta)
  (en La menor)
  (en Do menor, para que resulte más brillante)

A continuación se presenta la partitura de la melodía correspondiente al versículo cantado (las voces de acompañamiento se recogen en la partitura del propio Aleluya, para la estrofa tipo).

Aleluya de la Asunción

Presentamos aquí un nuevo Aleluya para Tiempo Ordinario (o Domingos durante el año), pensado para ser utilizado aproximadamente desde los primeros días del mes de agosto. Como se dijo arriba, parece recomendable situar el cambio de Aleluya en fechas cercanas a las vacaciones veraniegas, para comenzar el nuevo "curso pastoral" con un nuevo Aleluya.

Como también se dijo arriba, cuando nos encontremos versículos especialmente largos en texto, utilizaremos un Aleluya específico que se encuentra al final de esta sección.

El Aleluya, escrito en armadura de tonalidad de Do mayor, y en seis por ocho, comienza con una presentación de la melodía de la voz principal acompañada únicamente por el bajo; en la repetición aparece una tercera por debajo, y una melodía, la voz superior, pensada para acompañamiento musical. Además, aparece una última voz pensada para ser cantada como "Discantus" únicamente en la repetición segunda, al final del Aleluya. Lo llamaremos Aleluya de la Asunción por celebrarse esta solemnidad de la Virgen en esta parte del Tiempo Ordinario.

Respecto a la melodía para el versículo, se trata de una melodía acompañada de su tercera, lo que permite cantar el Versículo a dúo, junto al bajo golpeando prácticamente la nota del acorde, y una voz superior pensada para acompañamiento musical por instrumento de viento. Aunque en algunos versículos no se percibe tanto, al subdividir negras en corcheas para acomodar el texto, está fuertemente sincopada, al haberse escrito tres negras en un compás de seis por ocho (hemiolia); subráyese ese carácter sincopado en lo posible.

• Aleluya de la Asunción (para la parte de Tiempo Ordinario después de verano, y para estrofa corta)
  

A continuación se presenta la partitura de la melodía correspondiente al versículo cantado (las voces de acompañamiento se recogen en la partitura del propio Aleluya, para la estrofa tipo).

Aleluya del Pilar

Presentamos aquí el último Aleluya para Tiempo Ordinario (o Domingos durante el año), pensado para ser utilizado aproximadamente desde los primeros días del mes de octubre. Con este Aleluya, completaremos el año litúrgico hasta el comienzo del nuevo ciclo anual.

A diferencia del resto de Aleluyas, donde se presenta instrumentalmente el tema, en esta ocasión una voz solista canta como presentación la melodía del propio Aleluya, que luego el coro repite a varias voces (cantadas o instrumentales). Está escrito nuevamente en armadura de Do mayor, y en ritmo de dos por cuatro. Lo llamaremos Aleluya del Pilar por celebrarse esta fiesta de la Virgen en este tramo último del Tiempo Ordinario.

Como también se dijo arriba, cuando nos encontremos versículos especialmente largos en texto, utilizaremos un Aleluya específico que se encuentra al final de este apartado.

• Aleluya del Pilar (para la parte de Tiempo Ordinario desde octubre, y para estrofa corta)
  

A continuación se presenta la partitura de la melodía correspondiente al versículo cantado (las voces de acompañamiento se recogen en la partitura del propio Aleluya, para la estrofa tipo).

Aleluya de Santiago (para versículos largos)

Para terminar esta propuesta anual de Aleluyas con sus versículos propios, presentamos dos Aleluyas alegres, diseñados para que aparezcan a lo largo del segundo tramo del Tiempo Ordinario (desde después de Pentecostés hasta Jesucristo, Rey del Universo), cada vez que el Versículo es demasiado largo para ser acomodado en las melodías de los Aleluyas precedentes.

Existe la posibilidad de no tener que utilizar estos Aleluyas haciendo más fácil la vida a la Asamblea: los domingos en que el versículo es tan largo que no ha sido posible acomodarlo en las melodías de los Aleluyas precedentes (Aleluya de San Juan, de la Asunción y del Pilar), puede utilizarse el versículo recogido como estrofa tipo, ya que el propio Leccionario presenta la posibilidad de cantar ciertos versículos genéricos en todos los domingos del Tiempo Ordinario.

Llamaremos al primero Aleluya de Santiago por ser ésta una de las Solemnidades en las que lo utilizaremos, y al segundo Aleluya Compostelano, por el mismo motivo, pero para diferenciarlo del primero.

En realidad, se trata de dos Aleluyas alternativos diferentes, que tienen en común el acompañamiento musical (excepto algún cambio puntual por razones armónicas), y la melodía para la estrofa. Están escritos en fa mayor y compasillo. Comparten un comienzo con salto de séptima, poco intuitivo, aunque en el Aleluya de Santiago es de grado conjunto descendente.

• Aleluya de Santiago (para la parte de Tiempo Ordinario después de la Cuaresma, y para estrofa larga)
  
• Aleluya Compostelano (cambia únicamente la melodía del Aleluya de la Asamblea, y muy ligeramente el resto de voces en la segunda casilla de la repetición)
  

A continuación se presenta la partitura de la melodía correspondiente al versículo cantado (las voces de acompañamiento se recogen en la partitura del propio Aleluya, para la estrofa tipo).