Domingo de Pentecostés: Misa de la Vigilia. Salmo 3. Ciclos A, B y C.
Confitemini Domino,
quoniam in saeculum misericordia eius.
Sal 106, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9 (R.: 1)
Respuestas al Salmo Responsorial:
Dad gracias al Señor,
porque es eterna su misericordia.
Que lo confiesen los redimidos por el Señor,
los que él rescató de la mano del enemigo,
los que reunió de todos los países:
oriente y occidente, norte y sur.
Erraban por un desierto solitario,
no encontraban el camino de ciudad habitada;
pasaban hambre y sed,
se les iba agotando la vida.
Pero gritaron al Señor en su angustia,
y los arrancó de la tribulación.
Los guió por un camino derecho,
para que llegaran a una ciudad habitada.
Den gracias al Señor por su misericordia,
por las maravillas que hace con los hombres.
Colmó el ansia de los sedientos,
y a los hambrientos los colmó de bienes.