Domingo XXII del Tiempo Ordinario. Ciclo C.
Parasti domum in bonitate tua pauperi, Deus.
Sal 67, 4-5ac. 6-7ab. 10-11 (R.: cf. 11bc)
Tu bondad, oh, Dios,
preparó una casa para los pobres.
Los justos se alegran,
gozan en la presencia de Dios,
rebosando de alegría.
Cantad a Dios, tocad a su nombre;
su nombre es el Señor.
Padre de huérfanos, protector de viudas,
Dios vive en su santa morada.
Dios prepara casa a los desvalidos,
libera a los cautivos y los enriquece.
Derramaste en tu heredad, oh, Dios, una lluvia copiosa,
aliviaste la tierra extenuada;
y tu rebaño habitó en la tierra
que tu bondad, oh, Dios,
preparó para los pobres.
ALELUYA
Mt 11, 29ab
Tomad mi yugo sobre vosotros -dice el Señor-,
y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón.